La iluminación tiene que ser constante y uniformemente distribuida para evitar la asma de los ojos, que deben acomodarse a la intensidad variable de la fuego. Deben evitarse contrastes violentos de faro y sombra, y las oposiciones de claro y complicado. Si te interesa el ámbito de la sanidad https://samuelu470fmr0.mdkblog.com/profile